¡Buenas noches, Bihotzak! ¡Buenas noches, mi íntimo confidente!
Esta noche me apetece volver a mi infancia... Una infancia, vista desde la perspectiva de una mujer ya adulta y supuestamente madura, sólo supuestamente. Mi infancia ha sido una época mágica, divertida y , sin duda ninguna, feliz. Sí es cierto que como tod@s l@s niñ@s no todo me parecía así en aquel momento... tenía mis peleas con mis amig@s, con mis herman@s, con compañer@s de colegio... pero las típicas peleas que como empezaban acababan y, al final, nunca sabías cómo habían empezado, así que al de poco hacíamos las paces y proseguíamos nuestros juegos... que casi siempre se desarrollaban en la calle... Juegos en los que participábamos los niñ@s del barrio, chicos y chicas, de diferentes edades... Fútbol, campo quemado, escondite, a la cuerda, a la goma... Juegos en los que siempre pasábamos tardes enteras... y cuando llegaba la hora de irse a casa nadie quería subir...
Los días de lluvia también salíamos y si no, nos reuníamos en casa de alguna amiga, y si no veíamos la tele... tele que cuando descubrí se convirtió en una caja mágica, en la que veía dibujos animados, Heidi, Marco, Jacko y Nuca, la Abeja Maya... Series como la Casa de la Pradera, Bonanza, Los Walton, Con ocho basta, Galáctica... y otras series que me hacían sentarme delante de la tele y no quitar los ojos de la pantalla, series que cuando se reponen me hacen reír a carcajadas porque ya no las veo con la misma candidez e inocencia de antaño, tal vez porque mis ojos ya no son los mismos...
Hoy, sin embargo, alguien me ha recordado aquellos dibujos animados que marcaban la hora de ir a la cama... que, por cierto, era la hora más odiada del día... y he sentido una punzada de melancolía y nostalgia por aquello que he dejado atrás hace tantos años: la seguridad de los niños de que tus padres siempre estarán ahí, los sueños inocentes en los que te ves de mayor... En mi caso, cualquier parecido con la realidad, es, puramente y claramente, casual... (Me gustan más mis sueños de niña) . Me he visto sentada en la mesa de la vieja cocina haciendo mis deberes escolares con la siempre constante y vigilante ayuda de mi madre escuchando mis peroratas, callada y sonriente, mientras comprobaba que mis tareas estaban todas, todas, todas bien hechas y no he podido evitar dar un respingo viendome allí sentada, con un lápiz en la mano y un bocadillo en la otra, moviendo mis coletas con lazos rojos, asegurando a mi madre que de mayor sería como ella... mientras ella me decía que tenía que estudiar mucho para ser aquello que quisiera ser...
Y, tengo que reconocer que jamás hubiera podido ser como ella... Ocuparse de las cosas de casa, de cinco hijos, de su marido, de sus padres... No importaba si estaba enferma o si no, si tenía un mal día o no, ella hacía siempre frente a sus tareas y su cariño, su paciencia y su regazo nos cobijaba a todos, haciéndonos sentir especiales... ESkerrik asko, amatxu. Muchas gracias, ama y sigo diciendo que hubiera querido ser como tú.
viernes, 25 de febrero de 2011
jueves, 17 de febrero de 2011
Gracias a todos por ser como sois
¡Buenas noches, Bihotzak! ¡Buenas noches, mi querido confidente!
Esta noche no voy a soltar uno de mis desvaríos habituales, ni voy a quejarme, ni voy a aburrirles con mis habituales disertaciones que raramente tiene sentido. Esta noche sólo voy a dar las gracias a todas las personas que, de una forma u otra, hacen de mi vida una maravillosa y dulce experiencia. Personas que me proporcionan alegría, cariño, sonrisas y charlas divertidas y maravillosas que constituyen un pilar vital en mi existencia.
Ya,ya... Parece que estoy recibiendo un Oscar, un Goya, O la Concha de Oro y estoy soltando el discurso de agradecimiento pero es mejor aún. Por lo menos para mí. He recibido el mejor premio que se puede tener. Gracias a mis padres, herman@s, sobrin@s, tí@s, Prim@s... En definitiva, gracias a mi familia, la cual no se puede elegir según dicen, pero para mí es la familia que hubiera elegido, con lo buenos y los malos momentos, la familia en la que he crecido feliz y querida. Gracias, familia.
Gracias a mis amig@s que me soportan en mis desvaríos, que me animan cuando me derrumbo, que me apoyan aunque no aprueben lo que hago, que me consuelan cuando mis lágrimas se derraman como cataratas, gracias, y gracias por los maravillosos y dulces momentos que me proporcionais, gracias por comprenderme aunque no me entendais y gracias por estar conmigo. Tampoco olvido las risas, las fiestas y ... ¡Dejemoslo ahí!
Y, gracias a LST, por los buenos momentos que me proporciona. Mi siempre encantadora y amable María del Carmen, que me da alimento para la mente y el espíritu... No pensar mal: Libros, charla y risas. Y no puedo olvidarme de los amigos que allí he hecho, pese a la distancia y el cambio horario: dulce, divertida y mi siamesa, Raquel. Frank, un futuro médico que va a ser lo que él quiera ser, médico y escritor... Vales mucho,mucho, mucho, no lo olvides nunca y tampoco cambies nunca, dos de mis personas favoritas con las que comparto risas, conversaciones divertidas, serias y de todo tipo. Conversaciones que siempre me hacen reir y alegran mi día.¡Gracias por estar ahí, chic@s!
Y más personas que he conocido por facebook y con las que me siento a gusto. Lea, estupenda escritora y encantadora persona, Ruby, María Jesús, Cris, tanta gente que, sin conocerla, me hace sentir apreciada. Gracias!!!!!!!!!!!!!
Esta noche no voy a soltar uno de mis desvaríos habituales, ni voy a quejarme, ni voy a aburrirles con mis habituales disertaciones que raramente tiene sentido. Esta noche sólo voy a dar las gracias a todas las personas que, de una forma u otra, hacen de mi vida una maravillosa y dulce experiencia. Personas que me proporcionan alegría, cariño, sonrisas y charlas divertidas y maravillosas que constituyen un pilar vital en mi existencia.
Ya,ya... Parece que estoy recibiendo un Oscar, un Goya, O la Concha de Oro y estoy soltando el discurso de agradecimiento pero es mejor aún. Por lo menos para mí. He recibido el mejor premio que se puede tener. Gracias a mis padres, herman@s, sobrin@s, tí@s, Prim@s... En definitiva, gracias a mi familia, la cual no se puede elegir según dicen, pero para mí es la familia que hubiera elegido, con lo buenos y los malos momentos, la familia en la que he crecido feliz y querida. Gracias, familia.
Gracias a mis amig@s que me soportan en mis desvaríos, que me animan cuando me derrumbo, que me apoyan aunque no aprueben lo que hago, que me consuelan cuando mis lágrimas se derraman como cataratas, gracias, y gracias por los maravillosos y dulces momentos que me proporcionais, gracias por comprenderme aunque no me entendais y gracias por estar conmigo. Tampoco olvido las risas, las fiestas y ... ¡Dejemoslo ahí!
Y, gracias a LST, por los buenos momentos que me proporciona. Mi siempre encantadora y amable María del Carmen, que me da alimento para la mente y el espíritu... No pensar mal: Libros, charla y risas. Y no puedo olvidarme de los amigos que allí he hecho, pese a la distancia y el cambio horario: dulce, divertida y mi siamesa, Raquel. Frank, un futuro médico que va a ser lo que él quiera ser, médico y escritor... Vales mucho,mucho, mucho, no lo olvides nunca y tampoco cambies nunca, dos de mis personas favoritas con las que comparto risas, conversaciones divertidas, serias y de todo tipo. Conversaciones que siempre me hacen reir y alegran mi día.¡Gracias por estar ahí, chic@s!
Y más personas que he conocido por facebook y con las que me siento a gusto. Lea, estupenda escritora y encantadora persona, Ruby, María Jesús, Cris, tanta gente que, sin conocerla, me hace sentir apreciada. Gracias!!!!!!!!!!!!!
sábado, 12 de febrero de 2011
Misterios que me encantan
¡Buenas tardes, Bihotzak! ¡Buenas tardes, mi íntimo confidente!
Hoy estaba reflexionando, sí a veces reflexiono, en los misterios que encierra la vida y en especial la mía. No, no se asusten, por lo menos todavía. Prometo que no voy a hacer un tratado de filosofía, eso lo dejaremos para más adelante.
Misterios que como una detective aficionada, eso me pasa por leer libros de intriga y misterio, intento resolver, y aún no he hallado la solución... pero estoy en ello.
- ¿Por qué me gusta tanto la noche? Si no fuera porque soy humana y muy humana juraría que soy vampira (odio la sangre, adoro mi cama y fijo que me marearía volar) o un ave nocturna (adoro los búhos). No lo sé, pero me encanta la oscuridad de la noche, con la luz de la luna y las estrellas brillando... Como pequeños guiños de la noche. Me gusta el silencio que la envuelve, la tranquilidad,...
- ¿Por qué congeniamos con gente a la que nunca hemos visto y sin embargo sentimos cercana? Supongo que tendrá que ver algo con la empatía y el reconocimiento. Tal vez vislumbremos algo de nosotr@s mism@s en ell@s. Porque estamos en contacto pese a la distancia física y nos permite mostrarnos como somos sin miedo a ser juzgad@s. Porque descubrimos que hay gente en cualquier lugar del planeta que puede sentir como nosotr@s. No sé por qué pero sí sé que los momentos que vivo con ell@s son mis momentos mágic@s donde puedo hablar ( o escribir, ja,ja,ja), escuchar y reir formando parte de ello.
- ¿Por qué adoro los libros? Ufffffffffffffffffffff!!!! Aquí no sé que decir. Hace poco alguien comentaba... (Sí, va por ti) que es una adicción legal y cuánta razón tienes. Sí, en mi caso es adicción y compulsión. Soy capaz de pasar por un escaparate de tiendas de ropa, de calzado, incluso de una pastelería (me encantan los pasteles) sin pararme siquiera.....pero si se trata de una librería... Frenazo en seco y a pegarse al escaparate... como l@s niñ@s delante de una juguetería... y, eso no todo, no sólo me paro y miro sino que siempre acabo entrando y casi siempre salgo con un libro... y si es sólo uno ni tan mal. Y es que tengo unos gustos... Me da lo mismo un género que otro, me encantan muchos autores y siempre descubro algún autor u autora que me fascinará.
Y este último punto es el mayor misterio para mí... ¿Por qué adoro la lectura? Porque sí, así de fácil y complejo. Y este misterio lo pienso mantener toda la vida. El misterio que hace de un libro mi regalo favorito, junto con los peluches y anillos de plata, sí soy de buen conformar, me gusta todo... pero un libro... ¡ES LO MAS! Y cuando los compro, no es para rellenar estanterías u ocupar hueco. Los compro para leerlos y releerlos, porque a veces hasta los desgasto de tanto leerlos y cada vez que los releo descubro algo que había pasado por alto.
Así que mi recomendación de hoy es que compren un libro, no cualquier libro sino un libro que les llame la atención, y les aseguro que no se arrepentirán... Un libro se puede convertir en su amigo, su compañero, su maestro o simplemente en su mejor entretenimiento.
Y, con esta reflexión les dejo que quiero ver como sigue el libro que estoy leyendo y tomarme un café.
¡Buenas tardes y disfruten del fin de semana!
Hoy estaba reflexionando, sí a veces reflexiono, en los misterios que encierra la vida y en especial la mía. No, no se asusten, por lo menos todavía. Prometo que no voy a hacer un tratado de filosofía, eso lo dejaremos para más adelante.
Misterios que como una detective aficionada, eso me pasa por leer libros de intriga y misterio, intento resolver, y aún no he hallado la solución... pero estoy en ello.
- ¿Por qué me gusta tanto la noche? Si no fuera porque soy humana y muy humana juraría que soy vampira (odio la sangre, adoro mi cama y fijo que me marearía volar) o un ave nocturna (adoro los búhos). No lo sé, pero me encanta la oscuridad de la noche, con la luz de la luna y las estrellas brillando... Como pequeños guiños de la noche. Me gusta el silencio que la envuelve, la tranquilidad,...
- ¿Por qué congeniamos con gente a la que nunca hemos visto y sin embargo sentimos cercana? Supongo que tendrá que ver algo con la empatía y el reconocimiento. Tal vez vislumbremos algo de nosotr@s mism@s en ell@s. Porque estamos en contacto pese a la distancia física y nos permite mostrarnos como somos sin miedo a ser juzgad@s. Porque descubrimos que hay gente en cualquier lugar del planeta que puede sentir como nosotr@s. No sé por qué pero sí sé que los momentos que vivo con ell@s son mis momentos mágic@s donde puedo hablar ( o escribir, ja,ja,ja), escuchar y reir formando parte de ello.
- ¿Por qué adoro los libros? Ufffffffffffffffffffff!!!! Aquí no sé que decir. Hace poco alguien comentaba... (Sí, va por ti) que es una adicción legal y cuánta razón tienes. Sí, en mi caso es adicción y compulsión. Soy capaz de pasar por un escaparate de tiendas de ropa, de calzado, incluso de una pastelería (me encantan los pasteles) sin pararme siquiera.....pero si se trata de una librería... Frenazo en seco y a pegarse al escaparate... como l@s niñ@s delante de una juguetería... y, eso no todo, no sólo me paro y miro sino que siempre acabo entrando y casi siempre salgo con un libro... y si es sólo uno ni tan mal. Y es que tengo unos gustos... Me da lo mismo un género que otro, me encantan muchos autores y siempre descubro algún autor u autora que me fascinará.
Y este último punto es el mayor misterio para mí... ¿Por qué adoro la lectura? Porque sí, así de fácil y complejo. Y este misterio lo pienso mantener toda la vida. El misterio que hace de un libro mi regalo favorito, junto con los peluches y anillos de plata, sí soy de buen conformar, me gusta todo... pero un libro... ¡ES LO MAS! Y cuando los compro, no es para rellenar estanterías u ocupar hueco. Los compro para leerlos y releerlos, porque a veces hasta los desgasto de tanto leerlos y cada vez que los releo descubro algo que había pasado por alto.
Así que mi recomendación de hoy es que compren un libro, no cualquier libro sino un libro que les llame la atención, y les aseguro que no se arrepentirán... Un libro se puede convertir en su amigo, su compañero, su maestro o simplemente en su mejor entretenimiento.
Y, con esta reflexión les dejo que quiero ver como sigue el libro que estoy leyendo y tomarme un café.
¡Buenas tardes y disfruten del fin de semana!
martes, 8 de febrero de 2011
NO SOY CÓMPLICE
¡Buenas noches, Bihotzak! ¡Buenas noches, mi íntimo confidente!
Hoy quiero proclamar mi apoyo y respeto a tod@s l@s luchan por conocer la verdad de lo que pasó, a l@s que luchan incansablemente de forma valiente y decidida para conocer a sus familiares y tener la oportunidad de conocerse porque alguíen, hace años, cometió una canallada que no tiene excusa ni justificación.
Estos días han saltado a las páginas de los principales medios de comunicación ( televisión, radio, prensa, internet) la noticia sobre supuestas irregularidades en la adopción de bebés que abarca desde la década de los 50 o antes hasta prácticamente hace poco.
Lógicamente la adopción de niños se ha dado siempre. Había madres biológicas que ante la imposibilidad de cuidar y criar a sus hij@s los daban en adopción pensando que así tendrían una vida mejor. He oido decir que una madre jamás renunciaría a sus hij@s y los abandonaría. Probablemente eso sea verdad. Pero no podemos juzgar a esas madres, yo no lo hago, porque creo que debe ser duro para ella tener que renunciar a su bebé, sabiendo que nunca más lo vería, pero decidida a que tuviera una vida mejor que ella en ese momento no era capaz de darle. Y para qué negarlo. Tambien hay madres que no tienen ´ni un mínimo instinto maternal y que nunca desearon ser madres.
De todas formas, si uno de esos niños dado en adopción, al hacerse mayor desea conocer su origen creo que es perfectamente plausible y fácil de entender. En ese caso, podría desear conocer a su familia biológica y tendría todo el derecho a ello. De hecho, la ley juega en favor de estos casos, proporcionándoles los datos quw necesitan, poniéndose en contacto con La Diputación.
Otro caso son las adopciones irregulares en los que la mayoría de los datos que aparecen son falsos, no aparecen o están incompletos. En algunos ni siquiera consta la renuncia de la madre o la de los tutores de la madre si esta fuera menor de edad.
También se sabe que en muchos casos las madres eran coaccionadas o presionadas por médicos, monjas, familia para que renunciaran a sus bebés. En estos casos no consta que los recién nacidos fueran vendidos. Sí que en algunos casos se requería cierta cantidad de dinero para trámites legales o gastos de viaje...
Y en muchos de estos casos los niñ@s eran adoptados en comunidades diferentes a la materna. En la mayoría participaron monjas. En estos casos también se dan muchas trabas para conocer los orígenes.
En algunos casos, cada vez son más desgraciadamente, se descubrió que muchos de estos niños adoptados fueron robados. Se mercadeó con ellos, arrebatándoles a ellos y a sus familias la posibilidad de vivir juntos por el capricho de unos señores que decidían colocar a esos niños en familias que pudieran pagarlos.
Se actuó de forma canalla e injustificable diciendo a las madres que los niñ@s habían muerto, no dejándoles ver los cuerpitos e incluso se encargaban del enterramiento. Y ahí se pierde la pista. Son pequeñ@s que no constan en ningún sitio y para mayor desfachatez tampoco consta el ingreso de la madre en el hospital para dar a luz.
Aparte del dolor por la pérdida de sus bebés también tienen que oir que para qué remover nada de aquello, que no ha sucedido nada parecido, o que después de tanto tiempo... ¿por qué?. También he oído, escuchado y leído los comentarios de ciertos individuos que opinan que esas familias que buscan a sus hij@s, herman@s y mailto:niet@s lo lo que pretenden es destruir a las familias adoptantes... ¿Estamos tontos o qué?
No pretenden destruir nada, no pretenden acabar con esas familias, sólo quieren y tienen derecho a saber la verdad y a conocer a quien tanto buscan. Y creo que es algo necesario apoyarles y ayudarles a conseguirlo porque si no lo hacemos seremos cómplices de esos robos, de ese dolor que se provocó a tantas familias, de ese comportamiento cruel, despreciable y terrorífico que mostraron esos personajes al mercadear y lucrarse con seres inocentes, arrebatados a sus verdaderas familias. Y YO ME NIEGO A SER COMPLICE.
Hoy quiero proclamar mi apoyo y respeto a tod@s l@s luchan por conocer la verdad de lo que pasó, a l@s que luchan incansablemente de forma valiente y decidida para conocer a sus familiares y tener la oportunidad de conocerse porque alguíen, hace años, cometió una canallada que no tiene excusa ni justificación.
Estos días han saltado a las páginas de los principales medios de comunicación ( televisión, radio, prensa, internet) la noticia sobre supuestas irregularidades en la adopción de bebés que abarca desde la década de los 50 o antes hasta prácticamente hace poco.
Lógicamente la adopción de niños se ha dado siempre. Había madres biológicas que ante la imposibilidad de cuidar y criar a sus hij@s los daban en adopción pensando que así tendrían una vida mejor. He oido decir que una madre jamás renunciaría a sus hij@s y los abandonaría. Probablemente eso sea verdad. Pero no podemos juzgar a esas madres, yo no lo hago, porque creo que debe ser duro para ella tener que renunciar a su bebé, sabiendo que nunca más lo vería, pero decidida a que tuviera una vida mejor que ella en ese momento no era capaz de darle. Y para qué negarlo. Tambien hay madres que no tienen ´ni un mínimo instinto maternal y que nunca desearon ser madres.
De todas formas, si uno de esos niños dado en adopción, al hacerse mayor desea conocer su origen creo que es perfectamente plausible y fácil de entender. En ese caso, podría desear conocer a su familia biológica y tendría todo el derecho a ello. De hecho, la ley juega en favor de estos casos, proporcionándoles los datos quw necesitan, poniéndose en contacto con La Diputación.
Otro caso son las adopciones irregulares en los que la mayoría de los datos que aparecen son falsos, no aparecen o están incompletos. En algunos ni siquiera consta la renuncia de la madre o la de los tutores de la madre si esta fuera menor de edad.
También se sabe que en muchos casos las madres eran coaccionadas o presionadas por médicos, monjas, familia para que renunciaran a sus bebés. En estos casos no consta que los recién nacidos fueran vendidos. Sí que en algunos casos se requería cierta cantidad de dinero para trámites legales o gastos de viaje...
Y en muchos de estos casos los niñ@s eran adoptados en comunidades diferentes a la materna. En la mayoría participaron monjas. En estos casos también se dan muchas trabas para conocer los orígenes.
En algunos casos, cada vez son más desgraciadamente, se descubrió que muchos de estos niños adoptados fueron robados. Se mercadeó con ellos, arrebatándoles a ellos y a sus familias la posibilidad de vivir juntos por el capricho de unos señores que decidían colocar a esos niños en familias que pudieran pagarlos.
Se actuó de forma canalla e injustificable diciendo a las madres que los niñ@s habían muerto, no dejándoles ver los cuerpitos e incluso se encargaban del enterramiento. Y ahí se pierde la pista. Son pequeñ@s que no constan en ningún sitio y para mayor desfachatez tampoco consta el ingreso de la madre en el hospital para dar a luz.
Aparte del dolor por la pérdida de sus bebés también tienen que oir que para qué remover nada de aquello, que no ha sucedido nada parecido, o que después de tanto tiempo... ¿por qué?. También he oído, escuchado y leído los comentarios de ciertos individuos que opinan que esas familias que buscan a sus hij@s, herman@s y mailto:niet@s lo lo que pretenden es destruir a las familias adoptantes... ¿Estamos tontos o qué?
No pretenden destruir nada, no pretenden acabar con esas familias, sólo quieren y tienen derecho a saber la verdad y a conocer a quien tanto buscan. Y creo que es algo necesario apoyarles y ayudarles a conseguirlo porque si no lo hacemos seremos cómplices de esos robos, de ese dolor que se provocó a tantas familias, de ese comportamiento cruel, despreciable y terrorífico que mostraron esos personajes al mercadear y lucrarse con seres inocentes, arrebatados a sus verdaderas familias. Y YO ME NIEGO A SER COMPLICE.
lunes, 7 de febrero de 2011
El placer de leer
¡Buenas noches, Bihotzak! ¡Buenas noches, mi confidente!
Esta noche quiero hablar de mi gran afición que me proporciona placer, diversión, momentos de risas y de lágrimas, de amores y odios, de conocimientos e investigación. ¡Leer! Me encanta la lectura y disfruto con ella.
Gracias a la lectura puedo conocer diferentes países, culturas, filosofías y formas de vida. Puedo saber como es el Universo y puedo viajar donde quiera, cuando quiera y como quiera. Puedo acudir a una cena en Buckingham Palace, puede viajar a la Luna y tocar las estrellas, puedo descubrir tesoros escondidos y puedo ser quien yo quiera ser, y todo eso sentada en mi sillón, tomando una taza de café y abriendo un libro.
Desde niña me ha gustado leer. Primero los cuentos que me fascinaron con sus bellos y vistosos dibujos, cuentos que hablaban de princesas y príncipes, de mendigos y caballeros, de gatos con botas, de niños diminutos, de enanitos y brujas... Después aprendí a leer bien y empecé a leer libros, libros de niñ@s intrépidos y valientes, traviesos e incomprendidos. Descubrí a Joanna Spyri, autora de Heidi; Enid Blyton con sus libros de Los Cinco, Leí la serie de Torres de Malory, Los Tres Investigadores, Los Hollister... Todos los libros infantiles y juveniles de entonces.
Después crecí pero la lectura siguió siendo parte de mi vida. Me encanta leer, descubrir nuevos lugares, nuevas sensaciones, y nuevos autores. Ahora es más fácil descubrir un amplio abanico de autores y de libros que esperan en estanterías a que alguien los compre. Sí, los compre. ya dije en una ocasión que me gustaba descargar libros pero que también compro en Librerías y centros comerciales. Y, gracias a esas descargas y a Internet, he descubierto nuev@s autores y autoras, de los cuales he adquirido libros en papel.
Así que antes de echar la culpa de la posible ruina de autores y editoriales a Internet y a los blogs que divulgan la lectura pido que los gobernantes, incluida la Sinde, piensen en lo que quieren hacer. Si piensan que cerrando blogs van a conseguir algo están muy equivocados. Cerrarán uno y se abrirá otro, porque estos maravillosos blogs se dedican a difundir la lectura en todo el mundo, de forma que tod@s los ciudadan@s del mundo tengan derecho a leer, lo que quieran y cuando quieran. Porque la lectura no llega a todos los sitios, aunque sea triste decirlo. Conozco gente a través de blogs que no tienen posibilidad de acceder a libros en papel por dos motivos, principalmente, la falta de dinero, los libros en todos los sitios, están cada vez más caros, y la falta de libros, porque estos no llegan a todas las librerías del mundo. ¿Se tienen que quedar sin leer? No, no lo creo.
Animo a toda la gente a que lea y descubra todo un sinfín de posibilidades a elegir, hay muchos géneros, muchos autores y muchos libros que esperan olvidados, tristes, a que alguien los abra y se los lleve. Sea usted el afortunado y lleveselo a casa.
Esta noche quiero hablar de mi gran afición que me proporciona placer, diversión, momentos de risas y de lágrimas, de amores y odios, de conocimientos e investigación. ¡Leer! Me encanta la lectura y disfruto con ella.
Gracias a la lectura puedo conocer diferentes países, culturas, filosofías y formas de vida. Puedo saber como es el Universo y puedo viajar donde quiera, cuando quiera y como quiera. Puedo acudir a una cena en Buckingham Palace, puede viajar a la Luna y tocar las estrellas, puedo descubrir tesoros escondidos y puedo ser quien yo quiera ser, y todo eso sentada en mi sillón, tomando una taza de café y abriendo un libro.
Desde niña me ha gustado leer. Primero los cuentos que me fascinaron con sus bellos y vistosos dibujos, cuentos que hablaban de princesas y príncipes, de mendigos y caballeros, de gatos con botas, de niños diminutos, de enanitos y brujas... Después aprendí a leer bien y empecé a leer libros, libros de niñ@s intrépidos y valientes, traviesos e incomprendidos. Descubrí a Joanna Spyri, autora de Heidi; Enid Blyton con sus libros de Los Cinco, Leí la serie de Torres de Malory, Los Tres Investigadores, Los Hollister... Todos los libros infantiles y juveniles de entonces.
Después crecí pero la lectura siguió siendo parte de mi vida. Me encanta leer, descubrir nuevos lugares, nuevas sensaciones, y nuevos autores. Ahora es más fácil descubrir un amplio abanico de autores y de libros que esperan en estanterías a que alguien los compre. Sí, los compre. ya dije en una ocasión que me gustaba descargar libros pero que también compro en Librerías y centros comerciales. Y, gracias a esas descargas y a Internet, he descubierto nuev@s autores y autoras, de los cuales he adquirido libros en papel.
Así que antes de echar la culpa de la posible ruina de autores y editoriales a Internet y a los blogs que divulgan la lectura pido que los gobernantes, incluida la Sinde, piensen en lo que quieren hacer. Si piensan que cerrando blogs van a conseguir algo están muy equivocados. Cerrarán uno y se abrirá otro, porque estos maravillosos blogs se dedican a difundir la lectura en todo el mundo, de forma que tod@s los ciudadan@s del mundo tengan derecho a leer, lo que quieran y cuando quieran. Porque la lectura no llega a todos los sitios, aunque sea triste decirlo. Conozco gente a través de blogs que no tienen posibilidad de acceder a libros en papel por dos motivos, principalmente, la falta de dinero, los libros en todos los sitios, están cada vez más caros, y la falta de libros, porque estos no llegan a todas las librerías del mundo. ¿Se tienen que quedar sin leer? No, no lo creo.
Animo a toda la gente a que lea y descubra todo un sinfín de posibilidades a elegir, hay muchos géneros, muchos autores y muchos libros que esperan olvidados, tristes, a que alguien los abra y se los lleve. Sea usted el afortunado y lleveselo a casa.
domingo, 6 de febrero de 2011
Erase una vez
¡Buenas noches, Bihotzak!¡Buenas noches, mi íntimo confidente!
Erase una vez... Una introducción muy conocida por todos, que aprendimos de niños y que nunca olvidamos. Preludio de momentos mágicos narrados por una voz suave, cariñosa, que adoptaba diversos tonos y matices para encarnar a los personajes, nos llevaba a un mundo de fantasía que nos provocaba sentimientos de asombro, de risa, de miedo, de magia, de curiosidad. Ahora echando la vista atrás, nos acordamos de aquellos momentos y nos recuerda la inocencia que teníamos, llenándonos de ternura y melancolía.
Luego al crecer arrinconamos aquellos momentos. Olvidamos los sueños que teníamos y nos convertimos en personas adultas, algunos y algunas se quedaron anclados en la adolescencia y aún siguen allí, intentando salir adelante y dejando atrás esa niñez en la que todos nos parecía fascinante, divertido y emocionante. También teníamos nuestros miedos y nuestras preocupaciones.
De niñas y adolescentes teníamos sueños, ilusiones y objetivos que alcanzar, que no creo que sean tan diferentes de los que tienen los niños, niñas y adolescentes de hoy en día. Soñábamos con un futuro prometedor, un buen trabajo que nos permitiera ganar dinero e independencia, una casa estupenda, un marido o una mujer guap@, elegante, simpátic@ y unos niñ@s con los que fundar una familia.
En algunos casos se cumplió esos sueños y esperanzas, en otros no se cumplieron o quedaron a medias y en otros ni se llegaron a iniciar.
Pero, en cambio, se dieron otros sueños y objetivos diferentes. Lo importante es que casi todos aprendimos a soñar, a intentar cumplir los sueños y las fantasías y si eso no es posible creamos otras que reemplacen las anteriores y nos den un sentido a la vida. Eso es lo bonito de la vida, intentar cumplir los sueños y no dejarse vencer por las circuntancias ni las derrotas. Aprender de nuestros fracasos para que no se repitan y disfutar de las victorias, alegrarnos por nuestros logros y seguir adelante. Y ante todo debemos aprender a querernos y a valorarnos a nosotr@s mism@s porque la autoestima, el respeto por nuestros propios logros y el aceptarnos es lo que nos proporciona el valor, el ánimo y el coraje para conseguir lo que queremos y enfrertanos a nuestros miedos y debilidades.
Y eso lo aprendimos gracias a nuestros padres, abuelos, hermanos y a los cuentos que nos contaban cuando eramos niños. Esa fue la base de nuestra vida y el sostén durante todos estos años, el apoyo y el cariño, la raíz de nuestra vida.
Erase una vez... Una introducción muy conocida por todos, que aprendimos de niños y que nunca olvidamos. Preludio de momentos mágicos narrados por una voz suave, cariñosa, que adoptaba diversos tonos y matices para encarnar a los personajes, nos llevaba a un mundo de fantasía que nos provocaba sentimientos de asombro, de risa, de miedo, de magia, de curiosidad. Ahora echando la vista atrás, nos acordamos de aquellos momentos y nos recuerda la inocencia que teníamos, llenándonos de ternura y melancolía.
Luego al crecer arrinconamos aquellos momentos. Olvidamos los sueños que teníamos y nos convertimos en personas adultas, algunos y algunas se quedaron anclados en la adolescencia y aún siguen allí, intentando salir adelante y dejando atrás esa niñez en la que todos nos parecía fascinante, divertido y emocionante. También teníamos nuestros miedos y nuestras preocupaciones.
De niñas y adolescentes teníamos sueños, ilusiones y objetivos que alcanzar, que no creo que sean tan diferentes de los que tienen los niños, niñas y adolescentes de hoy en día. Soñábamos con un futuro prometedor, un buen trabajo que nos permitiera ganar dinero e independencia, una casa estupenda, un marido o una mujer guap@, elegante, simpátic@ y unos niñ@s con los que fundar una familia.
En algunos casos se cumplió esos sueños y esperanzas, en otros no se cumplieron o quedaron a medias y en otros ni se llegaron a iniciar.
Pero, en cambio, se dieron otros sueños y objetivos diferentes. Lo importante es que casi todos aprendimos a soñar, a intentar cumplir los sueños y las fantasías y si eso no es posible creamos otras que reemplacen las anteriores y nos den un sentido a la vida. Eso es lo bonito de la vida, intentar cumplir los sueños y no dejarse vencer por las circuntancias ni las derrotas. Aprender de nuestros fracasos para que no se repitan y disfutar de las victorias, alegrarnos por nuestros logros y seguir adelante. Y ante todo debemos aprender a querernos y a valorarnos a nosotr@s mism@s porque la autoestima, el respeto por nuestros propios logros y el aceptarnos es lo que nos proporciona el valor, el ánimo y el coraje para conseguir lo que queremos y enfrertanos a nuestros miedos y debilidades.
Y eso lo aprendimos gracias a nuestros padres, abuelos, hermanos y a los cuentos que nos contaban cuando eramos niños. Esa fue la base de nuestra vida y el sostén durante todos estos años, el apoyo y el cariño, la raíz de nuestra vida.
jueves, 3 de febrero de 2011
Desahogos que necesitamos practicar de vez en cuando.
¡Buenas noches, Bihotzak! ¡Buenas noches, mi confidente!
Hoy quiero confesar que estoy harta, harta y RE-harta. Harta de la gente que se mete donde nadie le llame, harta de la gente que impone, con golpe en la mesa incluido, sus opiniones y sus ideas aunque nadie le pida su opinión ni tan siquiera le pregunte la hora, harta de la gente que se cree lo más y no llega a... nada, harta de oír recitar a ciertos personajillos, no lo digo por su altura en centímetros sino por sus bajísimas neuronas,sus cualidades y virtudes a voz en grito pese a que nadie esté hablando con él o porque, precisamente, nadie hable con él, estoy harta de la gente que emite sus comentarios obscenos y desagradables, con una sonrisa en la boca como si estuviera proclamando una nueva filosofía, harta de que te quieran hacer cómplice de su necedad y estupidez, harta de ver como humillan a otros sólo porque los otros tienen más educación y sentido común que sus humilladores, harta de aguantar a gili... que se creen el centro del universo con sus comentarios graciosillos, que carecen de gracia, harta de morderme la lengua para no soltar las cuatro frescas que se merecen y mandarles a pacer hierba o a rumiarla. Lo mismo daría porque no lo entenderían.
Y llegados a este punto estoy harta de estar harta. En estos momentos, envidio a una persona que conocí una vez, la cual no se callaba ante nada ni ante nadie con la excusa que era malo reprimirse y guardarse para ella misma los disgustos, enfados e irritaciones. Y era de admirar como llevaba a rajatabla esos principios.
Su lengua era tan rápida a la hora de desahogarse que tendía a trabarse y no te daba siquiera opción a responder, pero nunca estaba harta, eso se lo tengo que reconocer (ya se encargaba ella de descargar sus preocupaciones o enfados). Y tampoco necesitabas darle conversación; no, a la hora de estar con ella, el problema era conseguir meter baza en la conversación.
Y te proporcionaba unos buenos momentos con sus cambios de tema, sus monólogos inacabables, sus diatribas furiosas y rápidas contra cualquiera que osara comentar algo sobre sus amigas o sobre ella o contra cualquiera que se atreviera a comentar algo poco acertado respecto a su locuacidad o cualquier otro aspecto que ella no estuviera dispuesta a permitir. Se convertía en un volcán en erupción con mezcla de maremoto y huracán. Bien es cierto, hay que decirlo en su favor, que tal como se encendía se apagaba y una vez que pasaba el desastre volvía a ser la que era y proseguía con sus charlas, como si tal cosa, mientras los que estábamos a su alrededor en el momento de entrar en erupción procurabamos apartarnos un poco, no fuera a ser que nos tocara algo, y cuando se acababa la erupción volvíamos a juntarnos y seguíamos con nuestras cosas.
Pero yo, por mucho que lo intento, no consigo emularla. Yo soy más de tragar, tragar y tragar, hasta que llega un momento en que estoy tan harta y tan llena de tanto tragar que me desbordo, como un río se desborda cuando las aguas salen de las presas y las lluvias son tan intensas y fuertes que aumentan su caudal y sale de su cauce. Así que, aunque sé el resultado final, no puedo evitarlo y lo triste es que al final pagan justos por pecadores.
Por eso decidí tener este lugar, mi propio lugar, para poder desahogarme y evitar que el río se desborde, un lugar en el que puedo hablar, pensar y confiar lo que siento, en el que puedo ser yo misma con mis defectos y virtudes, donde puedo escucharme y verme a mí misma, donde me siento segura y cómoda, donde quiero estar.
¡Buenas noches, Bihotzak! ¡Buenas noches, mi confidente!
Hoy quiero confesar que estoy harta, harta y RE-harta. Harta de la gente que se mete donde nadie le llame, harta de la gente que impone, con golpe en la mesa incluido, sus opiniones y sus ideas aunque nadie le pida su opinión ni tan siquiera le pregunte la hora, harta de la gente que se cree lo más y no llega a... nada, harta de oír recitar a ciertos personajillos, no lo digo por su altura en centímetros sino por sus bajísimas neuronas,sus cualidades y virtudes a voz en grito pese a que nadie esté hablando con él o porque, precisamente, nadie hable con él, estoy harta de la gente que emite sus comentarios obscenos y desagradables, con una sonrisa en la boca como si estuviera proclamando una nueva filosofía, harta de que te quieran hacer cómplice de su necedad y estupidez, harta de ver como humillan a otros sólo porque los otros tienen más educación y sentido común que sus humilladores, harta de aguantar a gili... que se creen el centro del universo con sus comentarios graciosillos, que carecen de gracia, harta de morderme la lengua para no soltar las cuatro frescas que se merecen y mandarles a pacer hierba o a rumiarla. Lo mismo daría porque no lo entenderían.
Y llegados a este punto estoy harta de estar harta. En estos momentos, envidio a una persona que conocí una vez, la cual no se callaba ante nada ni ante nadie con la excusa que era malo reprimirse y guardarse para ella misma los disgustos, enfados e irritaciones. Y era de admirar como llevaba a rajatabla esos principios.
Su lengua era tan rápida a la hora de desahogarse que tendía a trabarse y no te daba siquiera opción a responder, pero nunca estaba harta, eso se lo tengo que reconocer (ya se encargaba ella de descargar sus preocupaciones o enfados). Y tampoco necesitabas darle conversación; no, a la hora de estar con ella, el problema era conseguir meter baza en la conversación.
Y te proporcionaba unos buenos momentos con sus cambios de tema, sus monólogos inacabables, sus diatribas furiosas y rápidas contra cualquiera que osara comentar algo sobre sus amigas o sobre ella o contra cualquiera que se atreviera a comentar algo poco acertado respecto a su locuacidad o cualquier otro aspecto que ella no estuviera dispuesta a permitir. Se convertía en un volcán en erupción con mezcla de maremoto y huracán. Bien es cierto, hay que decirlo en su favor, que tal como se encendía se apagaba y una vez que pasaba el desastre volvía a ser la que era y proseguía con sus charlas, como si tal cosa, mientras los que estábamos a su alrededor en el momento de entrar en erupción procurabamos apartarnos un poco, no fuera a ser que nos tocara algo, y cuando se acababa la erupción volvíamos a juntarnos y seguíamos con nuestras cosas.
Pero yo, por mucho que lo intento, no consigo emularla. Yo soy más de tragar, tragar y tragar, hasta que llega un momento en que estoy tan harta y tan llena de tanto tragar que me desbordo, como un río se desborda cuando las aguas salen de las presas y las lluvias son tan intensas y fuertes que aumentan su caudal y sale de su cauce. Así que, aunque sé el resultado final, no puedo evitarlo y lo triste es que al final pagan justos por pecadores.
Por eso decidí tener este lugar, mi propio lugar, para poder desahogarme y evitar que el río se desborde, un lugar en el que puedo hablar, pensar y confiar lo que siento, en el que puedo ser yo misma con mis defectos y virtudes, donde puedo escucharme y verme a mí misma, donde me siento segura y cómoda, donde quiero estar.
¡Buenas noches, Bihotzak! ¡Buenas noches, mi confidente!
miércoles, 2 de febrero de 2011
La vida es para disfrutarla a tope. Vivela como si no hubiera un mañana.
¡Buenas noches! Hoy voy a ser poco original y voy a transmitir las palabras muy bien dichas, por cierto y que expresan lo que yo siento en este momento. Un momento lleno de sentimientos que me arrastran en varias direcciones.Si algo tengo claro es que la vida es como es y no como nosotros queremos y, a veces, por no decir casi siempre, nos lleva por un camino que no esperábamos. Así que solo diré que la vida hay que disfrutarla, vivirla como si no hubiese un mañana, aprendiendo de los errores para no repetirlos, y vivirla como nosotros queremos y no como los demás digan que debemos vivirla. En definitiva vivir la vida disfrutándola, sin hacer daño a nadie pero siguiendo nuestro criterio y no el de los demás.
Y ahora, tras este pequeño o grande desvarío personal, les escribo lo que unas sabias mujeres escribieron:
"La vida es muy corta para despertarse con remordimientos. Quiere a la gente que te trata bien y olvidate de los que no lo hacen.La vida pone a cada uno en su lugar. Piensa que todo llega y pasa por una razón. Si tienes una segunda oportunidad, agárrala!!! (Aquí yo diría, con las dos manos, muy fuerte y no dejes que se te escape). Nadie dijo que la vida sería fácil, solamente que valdría la pena!!!VIVE, DEJA VIVIR Y SÉ FELIZ."
Estas palabras tan sabias encierran para mí una gran verdad y resumen lo que para mí significa vivir. Vive cómo tú quieras, sin hacer daño a los demás y agarrándote a la vida con las dos manos para disfrutarla y ser feliz. Aprovecha los buenos momentos y aprende de los malos. No hagas nada de lo que puedas arrepentirte más tarde, no malgastes tu tiempo y tu vida con reproches, amargura y rencor porque eso sólo te hiere y te perjudica, agárrate a la calma, a la alegría y a los buenos momentos que te proporcionan los que te rodean y te quieren.
Unas palabras que me gustan son las que oí en un anuncio de televisión, seguramente las pronunciaría algún sabio muy sabio, pero yo las descubrí en el anuncio: "Cuando nacemos, lloramos y todos los de nuestro alrededor sonríen. Vive de forma que cuando mueras todos los de alrededor lloren y tú sonrías."
Creo que eso resume lo que me gustaría que fuera mi vida. Pero añadiría, ojalá no lloren mucho porque me gustaría que me recordaran también con una sonrisa cómplice recordando nuestra relación.
De esta forma, quiero recordar yo y, de hecho recuerdo, a las personas que se han ido de mi vida... Personas que han hecho que su recuerdo esté salpicado de lágrimas (por su pérdida) y de sonrisas (por los recuerdos que han dejado en mí).
Todo esto lo escribo en homenaje a todas ellas,un sentido y dulce homenaje, en especial a MS y GLL.
Y con estas palabras acabo:
"Las buenas amigas son como las estrellas, no siempre puedes verlas pero sí sabes que siempre están ahí"
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